el dramaturgo griego Esquilo, según la tradición propagada por Hermipo de Esmirna, murió golpeado por una tortuga que se desprendió de las garras de un águila que volaba casualmente sobre él.
Creemos que la tortuga tampoco salió bien parada…
Jesús González
Grande Messie,me has hecho abrir una cuenta jejeje un abrazo
jajajjajajajajaa. Me alegro Antonio, aficiónate a escribir !!!!!